Una de las batallas que ha librado la humanidad permanentemente es la pelea entre papás e hijos adolescentes. Un cruce de posiciones en las que cada una de las generaciones cree tener la razón y evidentemente es responsabilidad del padre saber cuándo tomar la posta y guiar el desarrollo adecuado de los comportamientos de sus hijos adolescentes.
¿Recuerdas cuando eras joven y sentías que tu familia no te comprendía? Pues ese pensamiento es intergeneracional, es decir tanto tú, como tus padres y abuelos lo han sentido con sus padres en algún momento de la juventud, por ello ser empáticos es primordial para establecer la relación con el adolescente.
Y esto se debe precisamente al cambio hormonal qué sucede en los cuerpos de los jóvenes durante la etapa de la adolescencia, entre los 13 y 17 años, el desarrollo tanto físico como mental que atraviesan provoca cambios en su comportamiento más repentinos y drásticos de lo que estamos acostumbrados
Reconocer que cada uno de nosotros pasó por una etapa similar es del primer paso y entender como acercarnos es del segundo para poder guiar a un adolescente que nos necesita. En este punto es importante resaltar la participación de la familia, no solo los padres (o uno de ellos) es responsable de brindar acompañamiento a su hijo adolescente, sino de todo su círculo de forma que tenga un ambiente de confort en el que desarrollarse.
Debes mantener presente que la comunicación es del principal recurso y que no puedes crear una barrera entre tú y tu hijo. Este es un camino de aprendizaje mutuo en el cual, tú también crecerás y cambiarás para adaptarte a un nuevo mundo que conoces de la mano de alguien de tu hogar.
En este acompañamiento a tu hijo adolescente, siempre recuerda que su seguridad es un factor primordial a la hora de tomar decisiones considerando que, por su situación social, sus cambios hormonales y su constante curiosidad por aprender y experimentar el mundo que lo rodea, está expuesto a un mayor riesgo de tener una eventualidad.
Duerme tranquila y aplica estos consejos que hemos preparado especialmente para manejar la situación en casa con hijos que atraviesan la edad más compleja y enriquecedora:
Cercanía:
Sé un libro abierto con tus hijos, escúchalos y dales la oportunidad de contarte acerca de su día a día, conócelos y permíteles mostrarse cómo son, de forma que, te transmitan todas sus dudas sobre los cambios que su mundo físico y emocional está viviendo y puedas ser tú su guía en este proceso de crecimiento.
No crees obstáculos o barreras en la comunicación, evita juzgar o emitir comentarios que pueden herir su susceptibilidad. Crea una comunicación bi direccional, no sólo preguntes lo que quieres saber si no lo que sea importante para tus hijos.
Al respecto, la doctora Patricia Ramirez de la Universidad de Buenos Aires, aconseja dar menos consejos y preguntar “si los desean recibir”, pregunta: ¿Te gustaría saber que haría yo? Evita ser un padre controlador y permite que tu hijo se comporte de forma fluida.
Redes sociales:
A diferencia de generaciones anteriores, los jóvenes de hoy deben desenvolverse en dos mundos: el físico y el digital. Sus redes sociales son sumamente importantes para el relacionamiento con amigos y compañeros, y por supuesto debemos darles apertura para integrarse a esta dinámica social con la que se maneja su generación, pero manteniendo el control de todo lo que está viendo, comunicando y recibiendo a través de los canales digitales.
Toma en cuenta que esta es una puerta abierta al mundo exterior y hay intenciones buenas y malas en ambos mundos, y saber cómo reconocerlas y enfrentarlas en fundamental para no ser víctima de un acto que atente su bienestar.
Controla el uso de dispositivos: establece un horario para poder utilizar su celular y poder descansar, periódicamente haz una revisión de su contenido, de ser posible con su supervisión y autorización, para que puedas validar que no está siendo víctima de ninguna manipulación externa.
Involúcrate en su vida:
Conoce su círculo, relaciónate con sus amigos y sus padres de forma que tengas la tranquilidad de saber con qué personas se desenvuelve tu hijo y asimismo cuentes con un soporte de ayuda cercana a él, en caso de alguna emergencia. Es una buena práctica anotar dos o tres nombres de sus compañeros y amigos más cercanos con sus respectivos celulares en un lugar fácil de encontrar.
Respeta su Estilo:
Cada persona es diferente a pesar de que convivamos dentro de una misma casa, cada miembro tiene su personalidad, gustos y estilo diferentes y es un detalle que debemos respetar y valorar. Toma en cuenta que la adolescencia es una etapa en la que los jóvenes se encuentran más inestables y susceptibles a estímulos externos como el bulling o el acoso por lo cual, formar hijos seguros de si mismos y empoderados en sus convicciones es una tarea que se trabaja en casa.
Control y límites:
Proceso tiene sus reglas y eso es lo que debes compartir con tu hijo. Sí bien tú y tu hogar están abiertos para ayudar y acompañar a tu hijo durante su crecimiento, es responsabilidad del adolescente comprender qué hay reglas que respetar y qué son las mismas que lo guiarán hacia una madurez exitosa por las que debe acatarlas. Cómo padre, tu responsabilidad es ser claro y establecer las reglas, creadas por mutuo acuerdo, pero establecidas con firmeza.
El castigo no es una solución ideal si se rompe alguna regla, existen métodos que facilitan el aprendizaje y la corrección de conductas, entre ellos el más importante el modelo visual que nosotros le ofrecemos con nuestro comportamiento, una sugerencia adicional es el “recurso de consecuencia” que consiste en comunicarle lo que puede pasar si hace o no algún acto.
Seguridad:
Contar con un seguro para proteger a todos los miembros de tu familia, especialmente a tus hijos adolescentes que están mayormente expuestos, es un gran recurso para garantizar tu tranquilidad y cuidarlos en todo momento. Siéntete presente en su vida en toda ocasión, con esta solución que acompaña a tu hijo y vela por su seguridad ante toda eventualidad. Un seguro de vida como Respaldo Familiar de Seguros Equinoccial es una gran opción para cuidar a todos en casa.